La dependencia casi total de las viviendas de las redes globales de consumo eléctrico unido a el encarecimiento de la energía eléctrica producida mediante combustibles fósiles y otros, hacen que las grandes eléctricas encarezcan cada año un poco más el precio del consumo eléctrico.
En lugares donde el sol luce durante una gran cantidad de horas, es posible reducir esa dependencia y parar ese encarecimiento por el uso de energía eléctrica, la clave es el uso de las placas solares fotovoltaicas para autoconsumo.
¿En qué consiste el funcionamiento de las placas solares?
La idea más eficiente del sistema de autoconsumo de energía solar fotovoltaica no consiste en el aislamiento total de la red eléctrica global, ya que esto produciría un riesgo importante y un desembolso en baterías y placas muy excesivo.
La idea es la de utilizar un sistema híbrido, lo que se denomina hibridación solar que haga un uso de la energía solar durante las horas del día donde más luce el sol, de forma que no se requiera un gran almacenamiento de la energía, para después hacer uso de la red eléctrica general cuando no haga sol o en horario nocturno.
Esto es útil por ejemplo si usamos las placas solares para la depuradora de la piscina o ponemos la lavadora en las horas que más sol hace.
Estas instalaciones híbridas no tienen un coste tan elevado como un sistema aislado y gracias a ese bajo coste, producen un ahorro real más que aceptable.
El avance de la tecnología en cuanto a la fabricación de baterías que tengan una mayor capacidad, irá haciendo que se avance en busca de sistemas aislados de energía solar, pero hasta entonces, para viviendas y pequeñas empresas la mejor opción es usar la hibridación solar.
¿Qué beneficios nos reporta el uso de las placas solares?
Una buena planificación en la instalación del sistema de placas solares para el hogar o nuestro negocio, por medio de una empresa especialista en la instalación de placas solares, nos puede reportar un serie de ventajas más que notables:
- Ahorro en la factura de la electricidad: Esta podría ser para muchas personas la gran y única ventaja de utilizar las placas solares. Y es cierto, el ahorro a medio y largo plazo es muy grande. Hay que tener en cuenta que durante gran parte del día se consume la energía que nosotros mismos generamos, y que por lo tanto no tiene coste. En la planificación de la instalación se debe tener en cuenta el periodo de amortización de la instalación y el periodo de consumo de energía totalmente gratis.
- Contribución a respetar el medio ambiente: La utilización de la energía eléctrica producida por el sol nos garantiza que estamos contribuyendo a la conservación del medio ambiente, ya que la producción tradicional de energía eléctrica en centrales nucleares y otras producen sustancias muy nocivas para el medio ambiente. Consumir energía solar es consumir energía limpia y que ayudará a conservar el ecosistema en el futuro.
- Instalaciones de larga duración con poco mantenimiento: Las placas solares y el resto del sistema de hibridación solar, tienen una larga durabilidad y un bajo mantenimiento, lo cual hace que tengamos un gran margen para recuperar la inversión inicial y beneficiarnos por el uso de dicho sistema. En resumen es una instalación sencilla y que da muy pocos problemas.
- La energía se consume en el lugar donde se produce: Esto supone que no hay pérdidas de energía en el transporte, y que por lo tanto no se desperdicia energía en la red global de electricidad. Es más, existe la posibilidad de aportar el sobrante de electricidad de nuestra pequeña instalación de autoconsumo, evitando así la producción de energía eléctrica de forma más agresiva. Además, conlleva ahorros estatales en la creación y el mantenimiento de las redes de distribución.
En conclusión, estamos ante un sistema eficiente y barato para producir nuestra propia energía eléctrica y así obtener los beneficios mencionados anteriormente. Si todos empezamos a colaborar en esta labor, conseguiremos ahorrar dinero y daños al planeta. La satisfacción personal no tiene precio.